Poco.
Poco me parece, mi señor, esa pequeñita, minúscula, I-NA-PRE-CIA-BLE menudencia de su incomodidad por unas INVISIBLES manchitas de nada.
¿Qué son comparadas con ...la calentura, el ardor del deseo insatisfecho y la urgente, imperiosa necesidad de haberle disfrutado a Ud., más cómodamente, más intensamente y de muchas más maneras? Me bajé de su coche en un estado de excitación... calamitoso. Con los pezones duros como piedras punzantes, el sexo palpitante y un sabor dulce, especiado, particular... en los labios.
-Mientras desencadenaba mi tobillo, en plena calle, ante la curiosidad de un hombre que se apoyaba en el quicio de un portal (tengo que admitir que no cuidé el cerrar las piernas, lo suficiente, con ese vestidito tan corto.... y teniendo que alzar la rodilla para alcanzar la cadenita. Que el cierre se atascó un poco y que me excitó mirarle fijo mientras me la quitaba, "no seré de otro que de mi dueño, puedes mirar, pajearte al recordarlo, sólo tendrás eso") me pregunté cuándo se daría cuenta de esas pequeñas e intencionadas marquitas, que la perversidad... hizo que dejara ahí, como una cadena seminal, con más poder de evocación que la que yo me estaba quitando de la pierna....
Llegar a casa y acogerme "a sagrado" en mi cuarto, para desvestirme de baja cama y revestirme de alta cuna, sin que me vieran y llegar a punto a la Z... fue una angustia.
Y de eso quería hablarle.Seré igual de perrita, húmeda, disponible y sumisa... vestida de mi misma. Anoche, en mitad de esos salones llenos de principales que me demostraban respeto... estaba su putilla de carretera, abierta de piernas, con las tetas sensibles al alcance de su mano caprichosa.....
Estaré feliz de vestirme así para mi amo, en la intimidad que nos evite el peligro de que una mirada indiscreta me comprometa..... dando al traste con algo que parece prometedor y divertido. Pasear de esa guisa no es seguro.
Me gustó conocerle. Y me gustó la manera firme en que me sujetó las manos, por dos veces. Me gustó su olor, el tacto de su piel y su barba en mis labios... no imagino qué sensación, deliciosa, podría ser sentir su boca en mi cuerpo, en mi coñito deseoso, en cualquier parte de mí.
Me gustó su vicioso deseo, su disponibilidad y la polla erecta, orgullosa, caliente y brillante que dejó que besara.... un poco. Su leche caliente y dulzona, delatora, que permitió que mamara... hhhmmmmmm..... aun ahora siento su sabor que vuelve a excitarme y me hace apretar el culo.
Volví de la cena y acabé lo que habíamos empezado. Necesitaba. Lo necesitaba. Así que complací a mi marido con una laaaaaaaarga, intensa y llena de registros mamada dirigida a Ud.... y sentí que no fuera capaz de azotarme por zorra.
Me he despertado pensando en esa fusta, el inmenso collar y la correa metálica. Me excitó y atemorizó, a un tiempo, verlas.... -La fusta la conozco, pero ¿qué se hará con las otras dos cosas?? -Mi señor me dijo que las había comprado antes de mí, para cualquiera que se prestase..... lo acepto. Pero espero ganarme otras propias, solo para mí y pensando en mí.
Ahora tengo que esconder todo deseo, conseguir que no se marquen mis pezones, dejar de sentir el inocente tampax como un dedo juguetón (lo sé.... lo sé... ), evitar transmitir esa hormona de celo, de puta disponible, de calentona y caliente... y ser seria, aséptica y trabajar.
Sé que mi amito, que es vicioso y descerebrado (a la vista está que se ha dejado mamar, en su propio coche, en medio de las luces de neón, rodeado de otros hombres, en pleno barrio navideño y justo antes de que le ¿manosearan? por encima de la polla... las inocentes fisioterapeutas), necesita un tratamiento que le desfogue y relaje. Y que su sumisa tendrá que ser adiestrada para hacerlo de la manera ideal para su dueño, quitándole de encima tooooooooooooda esa molesta lefa....
-Justo ahora, ahora mismito... me apetecería sentir su polla en mi espalda, dibujando mi columna y parándose en el punto donde se marca el nacimiento del culo, en el principio de la raja.... sentir la lefa caliente, escurriéndose y cayendo por mi culo, deslizándose hacia mi caliente, muy caliente..... ¡TENGO QUE TRABAJAR!
Un beso casto -como no puede ser de otra manera de alguien tan puro y angelical...-
, Loulut ;-))
P.D. He tenido mademoiselle (quizá la persona que más he detestado en mi vida, de ahí el poco o nulo aprecio a ese idioma), conozco el término. Pero me encantará que me lo explique, si eso le da placer.
11.3.08
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